Mario Vaquerizo ha sido hoy protagonista de otra de esas excentricidades que tan famoso le han hecho en España en los últimos años.

El artista y cantante, ha llegado un poco perjudicado al aeropuerto de Sevilla, después de una actuación que termino en fiestecita y que derivó a fiestón, y en lugar de coger el avión con destino a Madrid, entre las prisas y la confusión provocada por el alcohol y vaya usted a saber que más, el artista vio en la pantalla del aeropuerto Alaska y pensó, «pues ahí es donde voy yo, a Alaska, que buen servicio tienen los sevillanos que te ponen hasta el nombre de tu pareja para que no te líes», y tras embarcar se quedó dormido despertando en la otra punta del mundo.

El artista salió del aeropuerto medio desnortado, hasta el punto de no darse cuenta de la nieve, se montó en un taxi y dio la dirección de su casa. El taxista le miro extrañado y respondió en ingles, momento en el que Mario Vaquerizo pensó «como se está poniendo Madrid que nada más hay extranjeros».

El taxista viendo presa fácil en el cantante le dio una vuelta por la ciudad, lo dejó en medio de una calle cualquiera, aceptó los euros para no levantar sospechas y se quitó de enmedio.

24 horas más tarde, la policía local de Alaska encontró a Mario desnutrido, desorientado, muerto de frio con una camiseta de tirantes y gritando en medio de la calle, «mira maricón, yo no me puedo creer que en Madrid no hable nadie castellano».

El artista, que ya se encuentra en su piso de Madrid junto a su compañera Alaska, ha declarado a los medios que si no llega a ser por la policía todavía está en Alaska buscando su piso.