Kiko Rivera no atraviesa por su mejor momento. A la escasez de ingresos por falta de bolos, las presuntas infidelidades hacia su mujer y a la mala relación con su madre, hay que sumarle la falta de autoestima para entender porqué ha llegado el famoso Dj a un estado depresivo del que le está costando salir más de lo previsto.

«Estoy peor que nunca, no me encuentro bien ni física ni mentalmente. Me miro al espejo y me siento muy feo y muy gordo». Con estas palabras ha querido Kiko compartir con sus seguidores de Instagram su malestar general.

«Me está afectando mucho no poder trabajar. Jamás pensé que estás palabras saldrían de mi boca, pero cuando te acostumbras a trabajar es como cuando te enamoras, te cuidas, haces deportes…hasta te duchas más. Pero cuando te pegas dos meses sin trabajar ni poder salir te la suda todo», explicó en una historia de Instagram.

Fuentes cercanas a Isabel Pantoja han asegurado que lo que tiene Kiko es cuento chino, al entender que está intentando forzar a la madre para vender Cantora y dar carpetazo a todos sus problemas económicos. Esta es la única razón por la que Kiko no levanta cabeza.