Un hombre de Jaén se ha convertido sin quererlo en el primer español que ha caído en la famosa estafa de una empresa de micro injerto capilar de huevo en Turquía. Dicha sociedad, alojada en Estambul, lleva varios meses siendo investigada por la Interpol después de que centenares de turistas británicos, alemanes, y portugueses, denunciaran haber sido engañados con una suculenta oferta que ofrecía 7 días en Estambul todo incluido, y 3 sesiones de micro injerto capilar de regalo, que acabaría siendo bello púbico.

Lo que no sabían los clientes era que el pelo que iban a recibir en sus azoteas iba a ser de la zona genital de cualquier turco regordete. Morenito, cortito, pero rizado“con una textura rugosita y desagradable para la mayoría de humanos”, explicaba uno de los afectados en 2019 en su videoblog. Todos ellos se dieron cuenta de la faena ya en sus respectivas ciudades. De hecho hace escasos 30 días se proporcionó un teléfono de ayuda a los afectados para facilitar el tramite de sus denuncias contra dicha empresa y sumarse a otra querella colectiva.

Pero no este no ha sido el caso de Eustaquio Borbalán, quien asegura “estar muy feliz” siendo un pelo huevo. “Ahora por lo menos la gente me mira y se ríen conmigo. Muchos me paran por la calle para pedirme un selfie. Estoy en una nube”. Además, Borbalán afirma que los 3.500 euros invertidos “han sido los mejores gastados” en su vida.

“Me gustaría conocer en persona al hombre que tuvo estos pelos pegados a sus huevos, me lo imagino alto, guapo y muy moreno”.  Eustaquio Borbalán ya ha dicho públicamente que no va a demandar a la empresa que le ha “devuelto a la vida”, de hecho anima a todos los acomplejados a que se pongan pelo de huevo en la cabeza.