Hay algunos comensales del restaurante de ‘First Dates’ que pueden dejar de piedra a muchas personas con sus historias personales. Este es el caso del malagueño Agustín Gastando, un joven millonario de 32 años, que enmudeció a Carlos Sobera y logró conquistar a siete personas que se encontraban en el restaurante tras confesarle a su cita que en su casa se ponen las lavadoras a la 1 de la tarde:

“Tengo dinero de sobra, en mi casa se lava y se plancha a la 1 de la tarde y además abrimos bien las ventanas para que nos vean todos los vecinos y se den cuenta de que en mi casa hay dinero”, explicaba Agustín a Angustias, su cita, que tras escuchar su confesión rápidamente se levantó de su silla, le dio un apasionado beso en la boca y le dijo que era el hombre que había estado buscando durante toda su vida.

No solo Angustias quedó prendada con Agustín sino que además las dos camareras gemelas, Matías el bartman, y tres chicas que estaban cenando con sus citas, se acercaron a la mesa de Agustín para intentar conquistarlo. Agustín por su parte aseguró que no fue a ‘First Dates’ para buscar novia o novio, ya que por suerte tiene enamorado a todo el vecindario, que lo ven diariamente poner lavadoras, planchas y la vitrocerámica en la franja de hora punta.

«He acudido a ‘First Dates’ simplemente para que todo el mundo sepa que estoy montado en el taco y que en mi casa hay dinero. Lo de planchar y lavar de madrugada es de tiesos», concluyó Agustín a Carlos Sobera tras rechazar a su cita y a las otras 6 personas que lo quisieron conquistar.