Nos acaba de llegar a a la redacción de Cabronews en rigurosa exclusiva la historia de una mujer de aproximadamente 40 años que tras encontrarse un teléfono móvil en el suelo de un probador de una tienda de ropa decidió cogerlo y revisarlo.

El teléfono no tenía claves y de inmediato, Amanda Chismes, la mujer que encontró el teléfono, pudo ver unas conversaciones muy extrañas en él. Rápidamente notó que se trataba de un acto de infidelidad por parte de Agustín Zorro, dueño del móvil según aparecía en los datos del teléfono.

Un rato más tarde, Soledad Cornuda, esposa del dueño del teléfono perdido estando en su trabajo recibió una llamada que le hizo cambiar totalmente la imagen que tenía sobre su marido. “Yo estaba llevando a los niños al colegio, me entró una llamada de un número que no conocía y era mi marido Agustín diciéndome que había perdido su teléfono y que iba a darlo de baja, que no me preocupara».

«Minutos después me entró una llamada desde el teléfono de mi marido, por momentos me alegré porque pensé que me llamaba Agustín para decirme que el teléfono había aparecido, pero no, era una señora que me dijo que se lo había encontrado y que quería devolverlo pero que le daba cosa no mostrarme algo que había encontrado en el celular”, explicó Soledad a uno de los reporteros de Cabronews.

“La señora me dijo que iba a mandarme unas cosas por Whatsapp y después me llegaron un montón de pantallazos de una conversación de mi marido con otra mujer, en las que Agustín le decía que a mí no me quería, y que estaba conmigo por pena, porque eran muchos años de casados, y porque era del Betis, pero que en realidad a quien amaba era a ella. Más tarde me llegaron un montón de fotos de la chica que tendría como 15 años menos que mi marido. Así que decidí pedirle el divorcio a mi esposo pero por supuesto sacarle hasta el último euro al cerdo ese”, aseguró Soledad.

“Al poco llamé a la mujer que encontró el teléfono para darle las gracias por todo lo que me había contado ya que me había abierto los ojos. Además he demandado a mi marido Agustín y es probable que me quede aproximadamente con el 80% de los bienes según las cláusulas firmadas antes de contraer matrimonio», sentenció Soledad a nuestro reportero.