Esta semana ha salido a la luz una incómoda verdad que los directivos de las televisiones llevaban años ocultando pero que era imposible esconder durante más tiempo.

Según parece todas las televisiones del país se abastecen de presentadoras de informativos a través de una fábrica que las lleva clonando desde hace muchos años. La primera tanda de presentadoras salió poco después de que naciera la oveja Doly, y desde entonces han seguido experimentando hasta conseguir parecidos increíbles entre todas ellas.

Tras descubrirse el pastel el presidente de la asociación de televisiones ha salido a dar la cara mediante una rueda de prensa y ha declarado que, «cuando pensamos en esta medida nos pareció muy práctico, así se evitaría competencia entre las diferentes cadenas por robarnos las presentadoras de mayor nivel, de modo que todos tendríamos profesionales muy cualificadas aunque todas tuviesen prácticamente la misma cara».

«No nos sentimos orgullosos de ello y hoy en día cientos de expresentadoras con la misma cara circulan por todo el país, pero lo cierto es que salieron buenas», «fíjense si nos estaban saliendo buenas que una se ha colocado como Reina de España».