Un estudio hecho público en la mañana de hoy por la CEOE, apunta a que una de las mayores motivaciones a la hora de elegir ejercer como repartidor, es la posibilidad de que tras a puerta, te abra una bella mujer en pelotas.

Para saber más sobre tan curioso dato hemos querido hablar con Floren Viado, un repartidor de reconocido prestigio en el sector: «Llevo más de 15 años en esto y cada día me levanto con la ilusión de un bebé, sé que el día llegará y cuanto mayor sea la espera, mayor será la recompensa», nos cuenta con brillo en los ojos.

«El día que cumpla mi sueño no sé qué será de mí, pero mientras tanto, la emoción de no saber si detrás de la puerta estará lo que llevo anhelando media vida es una suerte que no todo el mundo tiene en su trabajo», relata tras entregar la última pizza del día.

«Mañana será otro día pero yo, como siempre, saldré con mi estampa de la Virgen de Fátima en el bolsillo izquierdo y mi foto de Nacho Vidal en el derecho por lo que pueda pasar».