Pablo Casado ha anunciado a bombo y platillo que no apoyará más prórrogas y ha pedido a Sánchez que vaya aligerando con el cachondeito del estado de alarma.

Como de costumbre, Pablo Casado nada entre dos aguas, por un lado tratando de seducir con su encanto neoliberal a la derecha más moderada y, por otro haciéndose el macho alfa para tratar de conquistar a la derecha más radical.

En esa tesitura de tener que vivir con dos caras, cada vez está más desconcertado y cada vez es más desconcertante, por lo que en la rueda de prensa virtual que ha ofrecido ha lanzado ideas erráticas y poco conexas. Estas han sido algunas de sus declaraciones.

«Yo al señor Sánchez lo respeto mucho, pero no lo aguanto, no puedo ver esa cara que tiene, no puedo con su cara joder, pero que guapo es, hay que reconocer que el tío es guapo de narices», «el confinamiento hay que respetarlo, es la única forma de acabar con esta calamidad que asola el planeta, pero la gente a currar ya hombre, que es eso de levantarse a las 12 y pegarse hasta las cuatro de la mañana viendo Netflix», «si el presidente del Gobierno nos pide otra prórroga yo me planto y pido penaltis, a ver si puede ser de una vez ya», «por lo menos que la próxima prórroga que sea a gol de oro o que meta a Messi en el Gobierno a ver si marca».