Antonio David Flores en rigurosa exclusiva para Cabronews, ha roto su silencio desvelando que la principal causa de su divorcio fueron los fuertes dolores de cabeza que sospechosamente sufría Rocío Carrasco, especialmente los sábados por la noche o cuando le apetecía un poco de «jaleo».

El colaborador también ha querido dejar claro que al ser una persona especialmente fogosa, necesitaba saciar sus ganas casi a diario y a partir del tercer año con suerte copulaba una o como muchas dos veces al mes.

«Me hizo muchas veces la cobra antes de que yo empezara a serle infiel con otras chicas. De una forma u otra tenía que desfogar, o en casa o fuera de casa. Es que me comía menos que un caracol en una lechuga de plástico», explicó.

«De no haber recibido tantas negativas hoy seguiríamos siendo un matrimonio ejemplar, como éramos antes de que Rocío empezara a despreciarme como lo hacía. Los últimos años no me tocaba ni con un palo largo», sentenció Antonio David Flores en exclusiva.