Tras 25 años de matrimonio, una vecina del castizo barrio madrileño de Lavapiés, aceptó acudir a un local de intercambio de parejas con su marido pensando que el intercambio sería para siempre.

Una reportera de Cabronews se ha desplazado hasta la capital de España, al encuentro de Consuelo Lagarta, protagonista de esta movida, para saber de primera mano cómo acabó la historia. Estas fueron sus palabras.

«Estaba hasta el moño de que mi marido me ofreciera nuevos juegos o experiencias sexuales. Lo último que me propuso fue ir a este local de intercambio de parejas y acepté».

«Me lo pasé en grande, allí conocí a Rogelio y a su esposa Angustia, un matrimonio liberal y divertido. La sorpresa me la llevé cuando tras una noche de sexo desenfrenado, me di cuenta que tenía que volverme a casa con mi marido. Yo pensaba que el intercambio era para siempre».

«Me llevé un gran disgusto pero desde esa noche sigo quedando con Rogelio a escondidas. Mi marido no quiere volver a ver a Angustia, le exigió demasiado. Le he propuesto volver pero él no quiere, no le gustó verme disfrutar de esa manera». Aseguró la Sra. Lagarta ante nuestra reportera.