Donald Trump no lo ha dudado «Los presos se estaban acomodando, tanto ponerles Metallica los estaba haciendo heavies pero no confesaba nadie». Tras una reunión con la CIA, Trump pidió mano dura, algo que realmente fuera insoportable hasta para el tipo más duro de ISIS o Al qaeda.

Los expertos se pusieron manos a la obra, exploraron todo tipo de tácticas intimidatorias, desde ahogamientos simulados a grandes descargas eléctricas con tibios resultados. Fue entonces cuando alguien trajo una cinta de TV3… «Fue instantáneo, cuando escuché la voz de aquella mujer, supe que tenía ante mí algo insufrible, el infierno en la Tierra» nos cuenta orgulloso Timothy Parson, director adjunto de Guantánamo.

Las pruebas no dejaron lugar a dudas, «Los presos arañaban las paredes, daban alaridos en menos de 20 minutos y confesaban cualquier cosa que les propusiéramos, para nosotros es como tener a Messi en el equipo, Pilar se ha convertido en una celebridad mundial en el mundo de la tortura. Realmente no puedo entender lo que dice pero debe ser muy interesante para que a la gente corra el riesgo de querer quitarse la vida escuchándola» nos confiesa un sorprendido Timothy.