Cristiano Ronaldo ha sido sometido in extremis a una operación de cirugía plástica para poder jugar en el Camp Nou el Clásico F.C. Barcelona – Real Madrid.

Según fuentes cercanas al entorno del portugués, este se ha implantado la cara de Mariano, el último fichaje del equipo merengue.

Al parecer Cristiano ya estaba harto de ver al Real Madrid perder y ha decidido que ya era hora de remontar la debacle blanca en este arranque liguero.

Mariano por su parte ha sido trasladado a Turín y encerrado en el garaje de la casa de CR7 para no dar ‘mosqueo’, le han montado en uno de sus cochazos y de momento parece que no se queja.