Corren tiempos complicados para la familia real española, o al menos es lo que se desprende de las últimas declaraciones de Iñaki Urdangarin a la salida de la cárcel y que ha podido recoger nuestra habilidosa reportera Mamen Terada.

«Llevo año y medio rodeado de centenares de mujeres, soy la envidia de cualquier hombre en su sano juicio, y encima no me puedo escapar, es la excusa perfecta ¿entiendes?»… «Por si fuera poco mi mujer se encuentra a cientos de kilómetros y si quiere asomarse a verme me avisan con días de antelación para prepararme el cuerpo».

«Como comprenderás estoy indignado con este juez impresentable que va de progre y que se piensa que yo voy a preferir salir de aquí por ayudar a los demás, ¿estamos locos o qué pasa?.»

Urdangarin, que en todo momento se pensó que la grabadora estaba apagada, confirmó a Cabronews que no puede emprender acciones legales porque levantaría las sospechas de la infanta pero que piensa asegurarse de volver a la celda de la que nunca deberían haberle sacado.

«A mí lo de ayudar a los demás no se me da nada bien, no sé ni por dónde empezar, no me sale, así que ya he hablado con Iván Redondo, para que me diseñe un plan que me devuelva a mi cárcel de mujeres ¡cuanto antes!».