Un informe encargado por la UE advierte del cambio de criterio, el primer gatillazo se impone entre los científicos como señal inequívoca que arroja un mayor grado de fiabilidad que la edad del individuo, como ocurría hasta ahora: «Nos hemos encontrado con multitud de impotentes que se hacían pasar por jóvenes saludables y eso es algo que no podemos permitirnos como sociedad» nos aduce Michael Landon, experto sexólogo.

«Lo cierto es que es fácil olvidar el día de tu 25 cumpleaños pero no así el de tu primer gatillazo, ese día queda grabado en tu memoria como el último en que puedes llamarte joven, un nuevo mundo como pureta se abre ante ti y eso requiere tiempo para ser asimilado» nos advierten varios psicólogos.

En el último congreso «El gatillazo como norma» se pone el foco en el papel de la mujer, pidiendo que se evite la mofa y la sonrisita por lo bajini como actitud predominante, ya que puede agravar gravemente el estado anímico del nuevo adulto y se recomienda que se opte por la condescendencia y la pena amable como actitudes más eficaces para paliar los efectos negativos del problema.
Del mismo modo se pone el teléfono 666 777 666 a disposición de todos los afectados, un servicio gratuito de ayuda psicológica que pretende dar herramientas ante situaciones incómodas y hacer ver al paciente que «te juro que es la primera vez que me pasa» no cuela en pleno siglo XXI.