Iñigo y Pablo se han enfadado y ya no se pueden ni mirar a la cara. Al parecer el problema lo han tenido porque su abuela Carmena le ha dicho a Pablo que es un niño muy malo y que debería seguir el ejemplo de Iñigo, que él sí es buen niño.

Desde Cabronews, hemos trasladado a uno de nuestros reporteros hasta Madrid Central para entrevistarse con la abuela Carmena que, tras invitarnos a su casa y prepararnos un chocolate calentito, nos ha dejado las siguientes declaraciones desde su mesa de camilla:

«Llevo mucho tiempo diciéndole a Pablo que tiene la boca muy grande y que cualquier día por culpa de eso perderá toda credibilidad, pero el es cabezón y orgulloso y nunca me ha escuchado, en cambio mi Iñigo, si es que tiene la cara de un bebé, yo es que me lo como, me lo comooooo!!!».

Según nuestro reportero tras terminar la entrevista con Carmena, ésta le cosió dos botones de la camisa que tenia sueltos, le puso dos parches en las rodillas de sus vaqueros que tenia ‘rotos’ y le dió 500 pesetas para que se comprara algunas chucherías.