Los hechos se conocieron el pasado viernes, mientras Paco Tilla, uno de nuestros reporteros, se encontraba sentado en un bar próximo a una peluquería de señoras, momento en el que observó como una mujer salía contenta del establecimiento.

Fue tan grande su asombro que dejó su cerveza casi entera en la mesa del bar y se aproximó al lugar de los hechos a intentar esclarecer lo ocurrido.

Guadalupe Inado, dueña de esta innovadora peluquería le dejó las siguientes declaraciones:

«Por fin tras muchos años trabajando en este mundillo he descubierto como hacer que mis clientas se vayan contentas de la peluquería de vez en cuando, por cada cinco peinados, regalo un bolso a elegir de entre los que tengo colgados en el perchero de la entrada», «Lo estamos petando».