El hecho ha ocurrido la semana pasada en una de las playas más famosas del litoral gaditano, más concretamente en el municipio de Conil de la Frontera, donde una veintena de pacientes fueron atendidos en el consultorio con el síndrome de ceguera pasajera por deslumbramiento.

Lo que ha alertado a las autoridades en este caso, es que las cegueras se producían a partir de las 19:00 que es cuando el pálido sospechoso solía bajar a la playa, con la excusa de que si bajaba antes se quemaba.

Desde Cabronews nos hemos desplazado a esas playas maravillosas y hemos podido entrevistar a uno de los afectados:

«Todo ocurrió súper rápido, yo estaba disfrutando de unos días en Conil, con mi señora y mis hijos,  serían las 19:30, cuando ese individuo sin previo aviso se colocó al lado nuestra, se quitó la camisa y su piel blanca hizo que en un instante toda la fuerza del sol se reflejará sobre mí”, nos dice con cara de preocupación por las posibles secuelas que pueda sufrir tras el incidente.